
REFORMA LABORAL: EL GOBIERNO PROPONE “SALARIOS DINÁMICOS” AJUSTADOS POR PRODUCTIVIDAD
La iniciativa plantea transformar el sistema de negociación colectiva tradicional, reemplazando los pisos salariales por topes de referencia y vinculando los aumentos a la productividad.
El Gobierno nacional avanza con un cambio estructural en el modelo laboral argentino mediante la incorporación de los denominados “salarios dinámicos”, una figura que redefine el rol de los convenios colectivos y de las paritarias. La propuesta fue presentada por el secretario de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, Julio Cordero, durante el Coloquio de IDEA en Mar del Plata, y constituye uno de los ejes centrales de la reforma laboral que impulsa el oficialismo.
El nuevo esquema busca que los salarios de convenio dejen de funcionar como “pisos” mínimos y pasen a actuar como “techos” de referencia, habilitando a cada empresa a pactar remuneraciones distintas en función de su productividad y capacidad económica. De esta manera, los acuerdos salariales dejarían de tener carácter uniforme y se adaptarían a la realidad de cada sector o unidad productiva.
Según explicó Cordero, el objetivo es “flexibilizar los mecanismos de actualización de ingresos” y eliminar la indexación automática por inflación, para vincular los aumentos con el desempeño económico real de las empresas. El funcionario sostuvo que este modelo “dotará de mayor competitividad al empleo formal” y fomentará la negociación descentralizada, en la que las empresas y sus trabajadores acuerden directamente las condiciones de pago y ajuste.
La propuesta también contempla reducir la vigencia de las cláusulas económicas de los convenios, promoviendo renegociaciones más frecuentes y ajustadas a los contextos macroeconómicos. Además, incorpora la noción de productividad como variable central para determinar incrementos salariales, buscando alinear los sueldos con la eficiencia y el rendimiento de cada sector.
Mientras las cámaras empresariales respaldan la iniciativa por considerarla una vía hacia la sostenibilidad del empleo, los gremios advierten que la medida podría debilitar la protección colectiva y aumentar las desigualdades entre regiones y actividades. Los sindicatos sostienen que los convenios han sido históricamente una herramienta de resguardo frente a la inestabilidad y que eliminar los pisos salariales implica un retroceso en materia de derechos laborales.
El debate sobre los “salarios dinámicos” continúa abierto en el marco de la discusión por la reforma laboral. El Gobierno defiende la iniciativa como un paso hacia un mercado laboral más flexible y competitivo, mientras que el movimiento sindical insiste en que la adaptabilidad no debe implicar la pérdida de garantías históricas conquistadas por los trabajadores argentinos.