
ESCÁNDALO POR LA TRANSMISIÓN DE PARTIDOS: POLÉMICA DECISIÓN DE LA LIGA CATAMARQUEÑA DE FÚTBOL
La resolución que restringe las transmisiones en vivo de los clubes locales desató el repudio generalizado de los medios catamarqueños. La medida, impulsada bajo el argumento de generar ingresos por streaming, fue considerada torpe y con fines particulares.
Un conflicto inusual sacudió al ámbito deportivo y mediático de Catamarca luego de que la Liga Catamarqueña de Fútbol y los clubes San Lorenzo, Independiente de la Capital y Atlético Policial anunciaran que las transmisiones de los partidos del Torneo Regional Federal Amateur serían exclusivas de la plataforma GM Live TV, con producción de Vivo Deportes Catamarca. La medida obliga a los espectadores a comprar una “entrada virtual” para acceder al contenido, lo que provocó la indignación de medios locales, periodistas y parte del público.
El comunicado, difundido de manera oficial, establece que solo esa plataforma podrá emitir las imágenes en vivo de los encuentros, mientras que los demás medios podrán realizar coberturas sin mostrar el desarrollo del partido. Las restricciones incluyen la posibilidad de transmitir únicamente imágenes fijas o de las tribunas, bajo amenaza de sanción o retiro de acreditaciones en caso de incumplimiento.
La disposición fue calificada como un “error torpe y evitable” que generó un inédito consenso entre medios que habitualmente compiten entre sí. En una provincia donde las disputas por pautas, primicias o derechos de cobertura son frecuentes, la reacción fue unánime: rechazo a lo que se percibe como una maniobra comercial cerrada y carente de transparencia.
La decisión, además, pone en duda la gestión de la presidenta de la Liga Catamarqueña de Fútbol y vocal del Comité Ejecutivo de AFA, Sylvia Jiménez, quien fue señalada por haber avalado un esquema que limita la libertad de prensa y privilegia intereses particulares. Aunque el argumento oficial apunta a generar recursos para los clubes, el manejo desprolijo del acuerdo y la falta de diálogo con los medios derivaron en un escándalo que podría haberse evitado con una política más abierta e inclusiva.